Un espejo negro de obsidiana (un tipo particular de piedra volcánica negra muy valorada por su brillo desde la más remota antiguedad) era utilizado por el consejero de la reina Isabel I, John Dee, para "hablar" con los ángeles. Había sido obtenido de quienes tenían posesión del artefacto mesoamericano profético, revela una nueva investigación.
El espejo luego fue adquirido por el Museo
Británico a finales de 1800 y actualmente se exhibe en la Galería de la Ilustración.
Las imágenes provienen del Codice Azteca (Codex Tepetlaoztoc) del siglo 16 que representan los espejos de obsidiana.
Los antiguos mesoamericanos creían que tales espejos podrían servir como portales a mundos espirituales.
(Cortesía de The Trustees of the
British Museum)
Información gentileza de Nat Geo