Hola
amigos. En esta oportunidad comparto unas palabras de Damasio respecto del
sentido de la Vida ofrecidas en el encuentro realizado en la ciudad de Puebla,
México durante el año 2015.
Quiero señalar
que la postura de este neurofisiólogo, así como la de otros científicos tales
como el grupo de Parma, ofrece una mirada alternativa al Proyecto Cerebro
lanzado a fines del 2013 que tiene tiene como objeto reproducir
tecnológicamente las características del cerebro humano.
El fin
último del proyecto BRAIN (Investigación
del Cerebro a través del Avance de Neurotecnologías Innovadoras) es mapear la actividad del cerebro, y desarrollar
técnicas para una gran simulación digital
del cerebro cuyos impulsores sostienen cambiaría nuestra manera de entender
la neurociencia, la medicina y la informática. Este cerebro virtual se podrá
ejecutar en superordenadores e incorporará toda la información que la
neurociencia haya obtenido hasta la fecha. Se espera que no solo permita
desarrollar nuevas pruebas diagnósticas para el autismo o la esquizofrenia,
sino terapias contra la depresión o la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, un
mapa del cableado de decenas de billones de circuitos neuronales inspirará el
diseño de ordenadores y robots inteligentes.
Los
propulsores del proyecto cerebro reconocen su deuda con Descartes y su
definición reduccionista de los procesos mentales aislados del cuerpo, las
emociones y aún de las percepciones sobre los hechos de la realidad
circundante.
Cuando una
buena parte de los científicos están participando de un proyecto que cuenta con
un enorme respaldo financiero internacional, vale la pena atender a las
reflexiones éticas de las pocas voces que resisten la presión clamando que no podemos
reducir lo humano a procesos de abstracción que excluyen la legítima búsqueda
de Bienestar integral como Derecho Humano fundamental. Vale recordar que el
concepto procede del Preámbulo de la
Constitución de la OMS, adoptado en 1946, que define la Salud Humana como un
“estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la
ausencia de afecciones o enfermedades” definición que no ha sido modificada hasta ahora.
En este
contexto se inscriben las palabras de Damasio ofrecidas en Puebla 2015.
Damasio
inicia su exposición recordándonos que los humanos somos los únicos que
reflexionamos sobre el sentido de nuestra vida.
El
sentido de la vida consiste en la satisfacción
cotidiana de hacer algo por nosotros mismos, conscientes al mismo tiempo
que contribuimos con nuestra parte en generar el bien común.
Es decir, el
sentido humano de la vida involucra la búsqueda
legítima de bienestar como derecho humano fundamental, frecuentemente
pasado por alto por los organismos de biopolítica internacional.
Damasio describe la felicidad como un estado
del ser que depende del bienestar físico, la sensación de alegría (o bienestar
emocional) y finalmente, y no menos importante, la reflexión personal sobre cómo nos sentimos con lo que hacemos, en
un orden de prioridades que recuerda la clásica pirámide de Maslow presentada
en 1943.
Pirámide de Maslow (1943)
La felicidad es un estado del humor, y para comprender mejor cómo contribuir a ella tenemos que entender la diferencia más evidente entre emoción y sentimiento.
La felicidad es un estado del humor, y para comprender mejor cómo contribuir a ella tenemos que entender la diferencia más evidente entre emoción y sentimiento.
Damasio
insiste que todos los sentimientos tienen valencia y generan efectos agradables
o penosos en el cuerpo y la vida.
Para mejorar cómo se siente uno respecto a su vida, la búsqueda de la felicidad constituye una propuesta más que legítima para generar el bienestar común.
Ofrece el marco para sentir y reflexionar sobre lo que hacemos y sentimos, cómo nos afecta lo que otros nos hacen, y cómo negociar lo que hacemos para generar bienestar en el otro.
Basta entonces de sentir y menos hacer sentir culpa por perseguir el bienestar y la autorrealización que nos merecemos por el mero hecho de ser humanos.
“Sean felices”, como búsqueda de sentido vital y absolutamente legítima, concluye.
Hasta la próxima amigos!!!